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Las muertes de los soldados podrían aumentar la presión sobre Netanyahu para llegar a un acuerdo que ponga fin a la guerra
Desde que comenzó la guerra contra Hamás han muerto 888 soldados israelíes. EFE/A. Sultán
Cinco soldados israelíes murieron en un ataque en Gaza, según informó el ejército israelí el martes, mientras que funcionarios de salud en el territorio palestino contabilizaron 18 muertos en ataques israelíes y la agencia de noticias Wafa elevó el número de víctimas palestinas a 35.
En Ciudad de Gaza, en el norte de la Franja, al menos cinco personas murieron y otras quedaron heridas tras un ataque aéreo israelí que, según Wafa, tuvo como objetivo un grupo de niños mientras jugaban en un columpio y una tienda de campaña que albergaba a familias desplazadas en el barrio de Al Rimal.
Mientras, en Deir al Balah (en el centro), un palestino murió y varios más resultaron heridos tras un ataque aéreo contra el tejado de una casa, según las mismas fuentes.
Y, de nuevo, durante esta jornada se han vuelto a registrar muertos y heridos cerca de uno de los polémicos puntos de reparto de comida del sur militarizado que gestiona la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF, por sus siglas en inglés), respaldada por Estados Unidos e Israel.
Entre ellos se encuentran dos niños fallecidos, cuya identidad se desconoce, y más de 35 heridos que fueron trasladados al hospital de campaña de la Cruz Roja instalado en la ciudad de Rafah, el único el único plenamente operativo en este punto del sur de la Franja de Gaza.
De hecho, Mohamed Sakker, director del Departamento de Urgencias del hospital Nasser en Jan Yunis, otra urbe sureña ubicada al norte de Rafah, alertó de que se ha quedado sin camas disponibles, y que están ubicando en las plantas de recepción a los gazatíes que llegan heridos tras ir a buscar comida, pese a que muchos de ellos requieren cuidados intensivos.
Según el Ministerio de Sanidad gazatí, más de 750 personas han muerto y más de 5 mil han quedado heridas cerca de estos centros y en zonas donde los residentes esperaban los pocos camiones de alimentos que ingresan de la ONU desde que Israel impusiera este nuevo modelo de distribución a finales de mayo.
La violencia ocurrió durante una visita del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a la Casa Blanca para conversaciones con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre un plan de alto el fuego para pausar los combates en Gaza. Aunque no hubo noticias de un avance, había señales de progreso hacia un acuerdo.
Las muertes de los soldados podrían aumentar la presión sobre Netanyahu para llegar a un acuerdo en Israel, donde las encuestas han mostrado un amplio apoyo para poner fin a la guerra.
Un funcionario de seguridad israelí dijo que se detonaron dispositivos explosivos contra los soldados durante una operación en el área de Beit Hanoun en el norte de Gaza, que fue un objetivo inicial de la guerra y un área donde Israel ha combatido repetidamente a milicianos que se reagrupan.
Los milicianos también abrieron fuego contra las fuerzas que evacuaban a los soldados heridos, dijo el funcionario. El funcionario habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a discutir el incidente con los medios.
El Ejército dijo que 14 soldados resultaron heridos en el ataque, dos de ellos de gravedad. Esto eleva el número de soldados muertos a 888 desde que comenzó la guerra contra Hamás en 2023.
La guerra comenzó cuando Hamás atacó a Israel el 7 de octubre de 2023, matando a unas mil 200 personas y tomando a otras 251 como rehenes. La mayoría han sido liberados en altos el fuego anteriores. Israel respondió con una ofensiva que ha matado a más de 57 mil palestinos, más de la mitad de ellos mujeres y niños, según el Ministerio de Salud de Gaza.
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