Las confrontaciones ocurrieron en el tercer día de manifestaciones contra la represión migratoria de Trump en la región, pero la llegada de efectivos federales provocó enojo y miedo entre los residentes

Por: El Informador

Dos mil agentes de la Guardia Nacional de Estados Unidos llegaron a Los Ángeles para tranquilizar las protestas por las detenciones masivas de migrantes. Van tres días de manifestaciones. AFP

Las tensiones en Los Ángeles se intensificaron ayer cuando miles de manifestantes tomaron las calles en respuesta al extraordinario despliegue de la Guardia Nacional de Estados Unidos por orden del presidente Donald Trump, bloqueando una de las principales autopistas y prendiendo fuego a vehículos, mientras las fuerzas policiales intentaban controlar a la multitud con gases lacrimógenos, balas de goma y granadas de aturdimiento.

Las confrontaciones ocurrieron en el tercer día de manifestaciones contra la represión migratoria de Trump en la región, pero la llegada de efectivos federales provocó enojo y miedo entre los residentes.

Para el mediodía, cientos de personas se reunieron afuera del Centro Metropolitano de Detención, donde están presos decenas de migrantes. Los manifestantes dirigieron cánticos de “¡Qué vergüenza!” y “¡Váyanse a casa!” a los miembros de la Guardia Nacional.

Después de que algunos manifestantes se acercaron demasiado a los agentes, otro grupo de uniformados avanzó sobre el grupo arrojando granadas de humo. Minutos después, el Departamento de la Policía de Los Ángeles disparó municiones de control de multitudes para dispersar a los manifestantes.

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El gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom, pidió a los manifestantes mantener las protestas pacíficas: “No le den a Trump lo que quiere. Hablen alto. Permanezcan pacíficos”. Y exigió al Gobierno federal retirar a los elementos de la Guardia Nacional.

Pero Trump ordenó a las autoridades “liberar a Los Ángeles de la invasión migratoria”, por lo que instruyó a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, al secretario de Defensa, Pete Hegseth, y a la fiscal general, Pam Bondi, a que tomen “todas las medidas necesarias” para poner fin a los disturbios.

Claudia Sheinbaum contestó que “no es con redadas ni violencia” como se puede atender el fenómeno migratorio. Informó que se reportan 35 mexicanos detenidos. “No estamos de acuerdo con esta forma de atender el fenómeno”.

CT

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